Educación en Artes Liberales
Actualizado: 28 ene 2023
Acabemos con el “analfabetismo funcional”
Fotografía: Fundación Soria.
Hoy en día tenemos mucho “analfabetismo funcional”. Un analfabeta funcional es alguien que sabe leer pero que no capta el sentido de lo que lee; que puede escribir pero sin ortografía y redacción inentendible; cuyo registro de vocablos y conceptos es muy reducido, y nula su competencia para el razonamiento abstracto; tampoco sabe expresarse muy bien, e ignora muchas cosas acerca de sociedad, economía, historia y política, pero sin embargo opina y vota.
La vacuna contra el embrutecimiento de la educación estatizada es la educación clásica, la que recupera “las herramientas perdidas del aprendizaje”, como les llamó Dorothy Sayers, pedagoga británica que en 1947 propusiera volver a las enseñanzas conforme el objeto y orden natural del proceso educativo.
La educación clásica se basaba en el Trivium (“tres vías”) y el Quadrivium (“cuatro vías"). El Trivium, primero, ofrecía las herramientas para aprender contenidos o “asignaturas” (Quadrivium). El Trivium se dividía en tres fases o edades: la Gramática, la Dialéctica y la Retórica. La Gramática enseñaba un idioma, no el materno sino el común, en aquel tiempo el Latín; sus normas, estructura y vocabulario. La Dialéctica enseñaba a razonar, mediante la lógica formal e informal. Y la Retórica enseñaba la expresión oral y escrita, correcta y de forma elegante. Con estas herramientas se comenzaba el Quadrivium, con sus cuatro asignaturas: aritmética, geometría, astronomía (o ciencias naturales) y música.
A este conjunto de conocimientos se le conoce como las Artes Liberales, precisamente porque pretendía formar “hombres libres” y pensantes. Solo con un bono educativo y la privatización de la educación será posible acabar con el analfabetismo funcional. Te invito a leer mi artículo Bono educativo y a conocer el proyecto Fusionista. ¡Activa con nosotros!