Organización celular
El Liberalismo no es una religión, una Ciencia o una Filosofía: es una doctrina política, y como tal requiere acción humana política. La organización celular es la más idónea para la acción política, sobre todo de tipo liberal. ¿Por qué razón? Porque funciona, para ser efectivos y eficaces. Además, para ser consistentes, los liberales debemos practicar aquello que predicamos, el gobierno limitado. Y en los grupos políticos, gobierno limitado significa estructura celular, que no inventaron los comunistas, sino que se copiaron de las iglesias cristianas perseguidas de los primeros siglos.
¿Qué es una célula, cómo es una estructura celular, para qué sirve, cómo funciona, y cuáles son sus ventajas?
1. Célula. Es un grupo pequeño, de no más de unos 15 miembros activos y asistentes regulares a las reuniones y actividades. Hay células territoriales, insertas en un área geográfica delimitada y células institucionales, penetradas en ciertas instituciones como lugares de trabajo, estudio, sindicatos, colegios profesionales y cámaras empresariales.
2. Mística. Cada célula tiene un nombre y un líder. Una vez a la semana en hora, día y lugar (fijo idealmente), cada célula tiene su reunión ordinaria. En grupos pequeños la información y la comunicación discurren con fluidez y amplitud, y todos participan en las discusiones y actividades. Cada quien se compromete de modo voluntario para funciones y tareas que puede cumplir, conforme a su capacidad, aptitudes y disposición de tiempo y recursos. Nadie se compromete a más de aquello que puede cumplir. Y si alguien encuentra un fallo, defecto o vacío en alguna tarea, lo dice claramente, al mismo tiempo que propone una solución, pudiendo él mismo ofrecerse a mejorar el trabajo.
3. Funciones. Básicamente cinco, entorno al concepto F.O.P.R.A.: Formación, Organización, Propaganda, Recaudación y Acción Política. A) Formación: mediante el Programa de Formación en sus diferentes niveles, los miembros deben dedicar tiempo a la lectura y discusión en grupo. Deben conocer, aprender y comentar el Manifiesto Liberal y los documentos que le sigan, y otros textos liberales (o videos), a fin de entrenamiento y manejo de objeciones. En el Movimiento no existe el “Departamento de Formación”, porque es tarea de cada célula. B) Organización: la célula constituye parte de “las bases” del movimiento o partido, por lo tanto, su formación y en general, el desarrollo del concepto FOPRA, es esencial para consolidar el partido de cuatro dimensiones que se busca: ideológico, programático, representativo y electoral. C) Propaganda: consiste es difundir el mensaje; uno-a-uno, en redes sociales, en prensa, radio y TV, si se puede. Incluye informar a los miembros de los avances, actividades, logros y obstáculos que se tienen dentro del movimiento o partido (comunicación horizontal), y también dentro del Foro Liberal de América Latina y el Centro de Liberalismo Clásico. El líder de la célula deberá estar informado y a la vez reportar el acontecer de cada célula a su célula madre o instancia superior. La información fluye desde el nivel local hasta el nivel continental, pasando por municipios, departamentos y países (comunicación vertical). D) Recaudación: cada miembro demuestra su compromiso haciendo un aporte mensual para las actividades F.O.P.R.A. de su célula y siguiendo el principio de Federalismo fiscal, cada célula contribuye con un porcentaje de lo recaudado a la célula coordinadora del nivel provincial o departamental, y otro porcentaje de lo recaudado a la célula madre o coordinadora del nivel nacional del movimiento/partido, para las funciones interdependientes (organización, propaganda, etc.). E) Acción política: por último, los miembros de la célula, formados e informados, deben hacer activismo político: poner en marcha diferentes actividades: formación, reclutamiento, propaganda y recaudación de fondos a favor del proyecto de La Gran Devolución y las 5 Reformas.
4. Liderazgo. Bajo la guía del líder de la célula, surgen y destacan los otros líderes funcionales, que se van especializando en diferentes aspectos: activismo, organización, recaudación y administración, comunicación, estudio y reflexión; en simpatía y carisma; y en actividades de apoyo a las diversas tareas; en resolución y arreglo de conflictos.
5. Estructura generacional. De la primera célula original, formada e integrada por los fundadores y líderes del movimiento, se desprende una o más células, una a la vez, que constituyen la primera generación o camada de células. Luego de superar niveles de formación y compromiso, ya maduras y consolidadas, de ellas se desprenden otras, con el tiempo. A partir de las células de la primera generación, van surgiendo otras, de una segunda generación, y después de una tercera, y así sigue el proceso. Cada célula es una reproducción mejorada de su célula madre y llega a adquirir su personalidad propia y distintiva, con su nombre propio.
6. Doble pertenencia. El líder de la célula conserva su pertenencia a su célula-madre. Los líderes de célula tienen entonces una doble membrecía; así, a través de ellos, la información y comunicación se distribuyen horizontalmente, y circulan verticalmente, entre la cúpula y las bases, atravesando los cuadros medios, en ambas direcciones.
7. Niveles. En tanto el movimiento o partido crece, sus nuevas células constituyen sus bases, y sus células madres constituyen sus cuadros medios, más antiguos, conocedores y experimentados. De modo natural y espontáneo cada camada de células se constituye en un nivel dentro de la organización: las células de las camadas más antiguas naturalmente orientan, lideran y controlan a las de las camadas posteriores, quedando aproximadamente al mismo nivel las de la misma camada. Así la organización celular es jerárquica, pero con el mayor grado de descentralización posible, sin “aparato” ni burocracia.
8. Objetivos. Y así se cumplen naturalmente dos series de objetivos. Primero, potenciar las tres funciones propias principales de un movimiento o partido político, a cargo de cada célula, por eso tampoco hay “Secretarías”: A) la difusión, promoción y propaganda; B) el reclutamiento y encuadramiento de nuevos miembros; C) la capacitación y entrenamiento de los cuadros y líderes, y su desarrollo en base a sus conocimientos, experiencia y méritos. Estas tres funciones corresponden con la metodología de liderazgo para partidos políticos F.O.P.R.A.: formación, organización, propaganda, recaudación de fondos y acción política. Estas funciones no son atribuidas a las entidades de una superestructura burocrática, sino a todas y cada una de las células en particular. Se logra así un rápido y explosivo crecimiento, espontáneo, pero en orden, preservando a la vez la identidad del movimiento o partido, su doctrina, sus principios, sus políticas y su cultura.
9. Resolución de conflictos. En segundo término, la estructura celular permite optimizar el manejo y la solución de los problemas típicos de los movimientos políticos; entre otros: A) Competencia por el Liderazgo; B) Lucha por la conservación de la identidad; C) Manejo del conflicto, que unas veces es por el liderazgo, y otras veces por otras razones o motivos, unas veces legítimos, y otras no tanto. La pérdida de la identidad es un problema, pero no lo es la sana competencia, y tampoco el conflicto: el problema es la incapacidad para tratar la competencia y el conflicto, y resolverlos apropiadamente, de modo tal que no se hagan un estorbo, sino fuerzas impulsoras, creadoras y productivas.
¿Viste? El concepto de “célula” es sólo una analogía, pero muy apropiada.
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Por Alberto Mansueti y Jorge Chapas | Última edición 2023.
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